martes, 7 de septiembre de 2010

UN GOBERNADOR SALTEÑO ASESINADO - BRIGADIER GENERAL DON PABLO LATORRE

Dice Fermín Chávez (30:1974) que el “brigadier general don Pablo Latorre se inició en la carrera militar antes de la Revolución de Mayo, en Buenos Aires. Con el grado de capitán se distinguió en la lucha contra los ingleses invasores en las jornadas de 1806 y 1807. A partir de entonces se constituyó en destacado patriota, en una acción de tres lustros a favor de la independencia americana. Con toda razón, el salteño don Miguel Otero lo llama uno de los fundadores de la independencia del Río de la Plata”. En 1813 ocupa en Salta las funciones de ayudante de plaza; en el ’16, con el grado de coronel en un cuerpo de infantería actúa a órdenes del general Güemes, siendo su segundo en la guerra contra la corona hasta 1821, año en que la Salta revolucionaria se viste de luto, quedando Latorre al mando de los ejércitos salteños, para luego seguir ocupando funciones militares durante los gobiernos de Gorriti y Alvarado.


Pablo Latorre Litografía de Bacle en Almanaque Federal para 1836.
Museo Histórico Nacional. Foto I Corbalán. (Iconografía de Rosas Pág. 30).

Siendo coronel, junto a sus pares Agustín Arias y Francisco Ibarra derrocan al gobernador de Salta, canónigo Gorriti que se había pronunciado por la Liga Unitaria que comandaba el general Paz. A Gorriti lo sucede el general Rudecindo Alvarado a quien Latorre y el coronel Pablo Alemán le dirigen un nuevo levantamiento federal que provoca su renuncia el 19 de noviembre de 1831. Es entonces en que a fines de este año Pablo Latorre es elegido gobernador de Salta y Jujuy ya que se trataba de una sola provincia, en un momento en que el historiador Chávez lo califica de “sumamente difícil y confuso.” Ya que los unitarios conspiraban desde Bolivia y a principios de 1832 operarían con guerrillas sobre Jujuy y Salta. Latorre delega el mando a su amigo el coronel Pablo Alemán y sale de campaña derrotando a los enemigos en Pulares.

coronel don Pablo Latorre

Debido a las exacciones cometidas por los jefes de la Liga Unitaria, la provincia de Salta, por orden de Quiroga, el vencedor de La Ciudadela, tenía qu8e pagar indemnizaciones a sus vecinas. Salta tenía que pagar 30 mil pesos en metálico (BAZAN 322:1986), 14.500 cabezas de ganado vacuno, 2.000 caballos y 800 bueyes al gobierno de La Rioja. A Catamarca y Santiago debía entregar 5.000 cabezas de ganado vacuno a cada una. A San Juan y Mendoza debe permitirles, por el término de ocho años, la introducción de sus frutos sin derecho alguno (sin pagar impuestos). A las duras cláusulas se agregaban otras de naturaleza política: La expatriación de los jefes y oficiales que combatieran contra “la causa de los pueblos”, con excepción de Rudecindo Alvarado, debido al respeto de Quiroga por su condición de guerrero de la independencia. Pablo Latorre quedaba al frente del gobierno salteño. “Su gestión –dice Armando Raúl Bazán (323:1986)- estará llena de sobresaltos. Cobrada parte de la indemnización, Quiroga regresa a La Rioja de donde le pre viene que exigirá su total cumplimiento y de lo contrario le será muy duro pero forzoso invadir Salta”.


Estas cláusulas hacen que su gobierno sea duro y pecuniario a fines de garantizar los pagos a que la provincia estaba forzada. Creándole enemigos por doquier. El 17 de noviembre de 1834 el panorama del norte se complica más todavía, cuando Jujuy se separa de Salta, en un movimiento encabezado por el teniente coronel José María Fascio. Por otra parte, Javier y Ángel López, enemigos de Heredia se refugian en Salta, desde donde hostilizaban al jefe tucumano. Por ello, el 19 de noviembre, Heredia con su ejército avanza sobre Salta; negándose los jujeños al mismo tiempo a auxiliar a Latorre, aun más, avanzaron también éstos sobre Salta. El 13 de diciembre, el coronel Santibáñez, del ejército jujeño, se encontró en Castañares con las fuerzas de Latorre, de quien era amigo.

Mariano Santibáñez

Algunos autores hablan de una batalla en los campos de Castañares, pero otros, como Otero, dicen que Santibáñez simula pasarse al bando salteño, incluso –se dice- enarbolando un pabellón de parlamento, un trapo blanco de paz, pero cuando estuvo junto a Latorre le dio un sablazo en la cabeza. Muy malherido, Latorre fue llevado a prisión a los altos del Cabildo de Salta, donde fue engrillado. El 29 de diciembre de 1834, sus enemigos lo mataron en la prisión, habiendo envuelto su cuerpo en un cuero para luego atravesarlo con dos lanzas. Después arrojaron su cadáver por el balcón a la plaza. Recordando Otero que “los demagogos enfurecidos lo arrastraron por el suelo, llenando de improperios el cadáver”. Fueron hasta el atrio de San Francisco con el cuerpo muerto, “cantando la chusma (CHAVEZ 31:1974) el Gori, Gori, según cuenta el mismo autor salteño -(Manuel Otero)- en su valioso Informe sobre los servicios del general don Pablo Latorre.”

Cabildo de Salta

Estaba casado con doña Petrona Sierra y fue hijo de este matrimonio el coronel Aniceto Latorre, de actuación en el partido federal después de Caseros. Indudablemente, la Historia Oficial que sepultó en el olvido a Rosas durante tanto tiempo hasta lograr la reivindicación de su imagen, se tomará mucho más tiempo para hacer lo propio con los otros personajes de nuestra historia salteña, argentina y americana. Americana, por que ante las pretensiones de un grupo de unitarios de incorporar la provincia de Salta a la República de Bolivia gobernada por el Mariscal Santa Cruz, fue Latorre y un puñado de coroneles argentinos que desbarataron dichos planes a fuerza de derrocamientos y levantamientos, pagando indirectamente con su vida el desmembramiento de Tucumán, Santiago, Tarija y Jujuy que luego conformaron el conjunto unitario denominado la Liga del Norte, enemistados profundamente con Latorre y sus ideas federales.

Basílica de San Francisco en Salta

Nunca hubo un homenaje a don Pablo Latorre, ni una calle solitaria de Salta lleva su nombre ni jamás un clarín llamado a silencio lo recordará un 29 de diciembre… Que pena no?

FUENTES:
BAZAN, Armado Raúl “Cap. XIV De la Ciudadela a Barranca Yaco” en HISTORIA DEL NOROESTE ARGENTINO. Ed. Plis Ultra. Bs. Aires. 1986.
CHAVEZ, Fermín “Pablo Latorre” en ICONOGRAFIA DE ROSAS Y DE LA FEDERACION. NUEVOS APORTES. Ed. Oriente S.A. Bs. Aires. 1974.

2 comentarios:

  1. Estimados: muy interesante el blog. Sobre este artículo si me permiten una aclaración sobre el movimiento autonomista de Jujuy. No fue éste un movimiento de Fascio, como se dice. Desde 1810 Jujuy buscó su independencia política de Salta; a todos sus diputados les encomendó gestionarla; el Cabildo enfrentó a Guemes porque se le quería obligar por la fuerza a reconocerlo como gobernador sin haber participado de la elección; las gestiones del teniente de gobernador Agustín Dávila en 1822. En fin...son muchos los antecedentes de una vocación autonómica que se desdibuja cuando se la presenta como la política de un hombre, que ni siquiera era jujeño. Saludos.

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  2. Muchas gracias por su aclaración Irene. Saludos.

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