martes, 7 de diciembre de 2021

ESTEBAN CELEDONIO NUÑEZ

 



Nació en la ciudad de Salta. Creció en el barrio Luján, junto a sus padres. Participó en varios certámenes literarios, entre los que se cuentan: "Homenaje a Carlos Gardel" (3er. Premio); "Semana de la Policía Federal" (2do. Premio); "Juegos Florales Bicentenario de la Patria" (2do. Premio) y "Poesía Navideña Municipalidad de Salta" (1er. Premio).

Participó en la "Antología de Escritores de Rosario de Lerma (2018); "Morada de Ensueños y Versos" (2019); "Acuarela de Sentimientos" (2019); "Casi sin Darnos Cuenta" (2020); Antología de las Islas Malvinas "Mario Vilca Condori"; "Antología del Hombre" de Potosí, Bolivia (2021).

De su producción, publicamos los siguientes poemas...


VUELVE RAMÓN

"Al poeta Jesús Ramón Vera
que se quedó en la mitad
de un sueño, la vida
no le perdonó su quimera."

Vuelve por la línea de tus versos
a tu casa, de la "Martín Cornejo"
que te espera en la esquina, el recuerdo
golpeando su caja
                          de sueños.
La copla se vuelve niña, en tus ojos
y con su inocencia busca
despertar al brujo
                     de tu corazón.
En el carnaval de tu sangre
con su comparsa de luto, baila
su danza final
                       el vino.
A tu orilla llegará náufrago el amor
desbordando el río de tu poesía,
sumergirás tu alma, hasta el fondo
de un sentimiento.
Emergerás, hecho poeta para rondar
nuevamente
por tu viejo barrio veinte, soñoliento
de madrugadas, en tu imprenta
por tus amigos, tu esquina
por las calles Belgrano, Ibazeta
donde disfrazado cacique de tu alegría
desfilabas en contramano de la vida
extrañándote te pedimos
que vuelvas
                         Ramón.
Que aún queda una esperanza
en el rescoldo de tu lucha.

Te fuiste, como un pasajero
que se va en un tren repentino
sin dejarnos un adiós
                                    Verita.
Aún te espera este amigo
que no conociste.

Se queda sin respuesta, la pregunta al poeta
¿Es la amistad, un poema
que se enciende en el vino?


POEMA DE NAVIDAD

Canta la estrella
que adorna la noche,
con su luz pequeña, que crece,
en el vidrio de la ventana,
su canción de sol.

La mesa viste su rostro
de pan,
se desmaya, en los brazos
de la espera,
                  la alegría.
Una música me recuerda
tu sonrisa lejana.
¡Ojalá! Pudieras regresar
esta noche, querido hermano.

La distancia, abre su paraguas
de olvido,
pero esta lluvia, me crece del alma.
Solo abrazo, a la memoria
con tu recuerdo.

Alcanzar, las palabras calladas
el silencio,
cuando a las doce,
tu nombre se apague en la mesa
una canción muda,
                            pedirá por tu regreso.

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