miércoles, 22 de diciembre de 2010

EL SALUDO DE LUIS FERNANDO ESCOBAR DUQUE


Súplica a los pies del Pesebre

Apreciado Don Marcelo Ruben

Tanto en la sublime noche de Navidad, cuanto en la del Año Nuevo, cargado de aprehensiones y de esperanzas, depositemos todos nuestros anhelos a los pies del Niño Dios, que sonríe misericordioso bajo las miradas extasiadas de María y José.

Supliquémosle que nos deje ver en los días venideros aquella regeneración transformadora de tal forma que la moralidad general, hoy en catastrófica decadencia, se yerga nuevamente al suave y victorioso soplo de la fe.

Que la Santa Iglesia se sobreponga por fin a la crisis dramática en que vive, en estos días de confusión y de angustia, y que sea reconocida por todos los pueblos como la única Iglesia verdadera del único Dios verdadero, como la inspiradora y Madre de todo bien espiritual y temporal. Y que, abriéndole a Ella sus corazones, ilumine con esplendor solar a todos los individuos, familias, instituciones y naciones.

Estos son los votos que formulamos, en el umbral de este año, los cuales hacemos extensivos cordialmente a todos nuestros lectores y a sus respectivas familias.

Por la intercesión victoriosa de María, nuestras súplicas serán atendidas.

Luis Fernando Escobar Duque

Director

No hay comentarios:

Publicar un comentario