No tiene miedo el Aguirre libra su vida a la suerte, a puro vino y jolgorio esquiva siempre a la muerte. Voy llamando en las alturas con el silbo de mi quena, pa´ que cuide a mis vicuñas la figura de Coquena. De vicuña te i´ tejio este poncho con el alma, pa´ cargar a tu changuito arropao a las espaldas. La quena tiene ese silbo bien dulzón de la quebrada, que enamora corazones con sentir de madrugadas. Como una cañita tierna Vidita con tu dulzura, me dejás en cada beso tu terroncito de azúcar. Estas penas que yo tengo las quiero mojar en vino, así se machan y duermen calladas en el olvido. No matés a las vicuñas Coquena se va a enojar, que si Coquena se enoja de noche te va a llevar. José Cantero Verni. |
jueves, 6 de enero de 2011
LAS COPLAS DE JOSE CANTERO VERNI
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