En lo que respecta al cine, la ciudad iba imperceptiblemente declinando a dejar el cine de lado. No se notaba mucho, pero quizás por razones económicas, políticas (pues era un año de abundantes atentados con bombas), o por la poca oferta de buen cine e invasión de comedias picarescas, el cine se iba quedando sin público asistente y, en la década posterior, tocaría fondo hasta cerrar más del sesenta por ciento de los mismos. Pero, aún así, casi todas las salas conocidas de la ciudad seguían funcionando, menos el antiguo Cine Güemes de calle Zuviría primera cuadra, el que se encontraba fuera de funcionamiento y pronto se convertiría en una playa de estacionamiento para automóviles. El termómetro que marcaba el declive mencionado fue la suspensión en casi todas las salas de la función “Matinée” que era en las horas de la siesta o tarde bien temprano. Con respecto a las limitaciones por ley, los filmes eran: “Aptos Para Todo Público”, “Inconvenientes Para Menores de 14 años” y “Prohibida Para Menores de 18 Años”.
Asimismo, las salas tenían su estatus, había cines para un elevado nivel poblacional; otros que las malas lenguas decían: “A ese cine no voy, ¡Está llenos de piojos! ¡Ahí van las sirvientas!”. A pesar de lo mencionado, casi todos los principales cines de Salta tenían un único dueño y era la famosa “Viuda de Renzi”, a la que imaginábamos una señora llena de dinero, realmente un mito viviente y esposa del pionero del cine salteño. También estaban los cines parroquiales que solo abrían sus puertas los fines de semana y otros que se alejaban del limitado centro de la Salta de entonces, para instalarse en lo que hoy llamamos macro centro, pero para la época eran cines barriales. El interior también experimentó sus cines, como el caso de Orán con el “Cine Andalucía”, en el que el público dejaba sus bicicletas y motos debajo de la pantalla, también dentro de la sala había un kiosco sandwichero y si llovía no se escuchaba nada por el techo de chapas; el de la familia Astum “Cine Orleáns” tenía un perfil mucho más elevado. General Güemes, contaba con el “Cine Ideal”. Tartagal, el “Cine Teatro Tartagal”; Aguaray el “Cine YPF” y el “Cine Aguaray” que era del mismo propietario del “Cine Pocitos” en la localidad de Salvador Maza. De esta manera tenía cines Mosconi, Metán, Joaquín V. González y Rosario de la Frontera. En el valle de Lerma, lo común era el cine ambulante, aunque hubo pueblos que contaron con sus salas.
En la ciudad de Salta funcionaban los siguientes cines:
El Cine Victoria que antes ostentaba el rango de “Cine-teatro”, como muchos en Salta, pero que, para estos años, solo se auto mencionaban: “cines”. Esta sala quedaba en la calle Facundo de Zuviría, primera cuadra, en las mismas instalaciones del actual Teatro Provincial, cerca de la intersección con calle España. Era para un público selecto, aunque con tan buena programación que hasta la clase media baja se acercaba a sus butacas. Las instalaciones contaban con pullman (balcón de primer piso) y súper pullman en el segundo piso, sectores que el vulgarismo salteño llamaba “gallinero”.
Recordemos que incluso en aquellas épocas, muchas personas no se arrimaban a la plaza nueve de julio, por considerarla a la zona impropia para las clases bajas; asimismo, había diferencias entre el lateral este y el oeste del mencionado paseo público, aclarándose que los edificios que se levantaban al frente del lateral este, incluidas las confiterías y negocios, eran copados por la elite social. Las clases más bajas solo permanecían en su carácter de brindadoras de un servicio (lustrabotas, canillitas, mozos, etc.)
Bien, continuando con lo nuestro, el Cine Victoria, ofrecía dos funciones diarias (selecta y noche), de lunes a viernes, la primera a las horas 18,15 y la segunda a las horas 21,45 pero como al fin de semana se le agregaba la función Trasnoche, los horarios eran los siguientes: selecta a hs. 17,45; noche a hs. 21 y trasnoche a hs. 0,45. Para mencionar algunas de las películas que se estrenaron ese año, recordaremos las siguientes: “La Aventura es la Aventura”, “Cinco Locos Avivados”, “Un Toque de Distinción”, “Lo Llamaban el Sargento Azul”, “Un Disparo en la Sombra”, “Una Francesita en Apuros”, “El Triturador” y “Los Chacales del Oeste”.
El Cine Alberdi se encontraba en calle Juan Bautista Alberdi, primera cuadra, en el actual Teatro de la Ciudad y lo que es hoy la peatonal Alberdi y que en esa época era una calle con veredas muy angostas. Un cine para la clase media, aunque indistintamente el salteño según la programación iba a uno u otro cine del centro. Este cine no tenía función trasnoche y ofrecía dos funciones: selecta a hs. 18 y noche a hs. 21,45
Entre los filmes que se proyectaron ese año se encuentran: “La Perversa”, “El Lamento de Portnoy”, “Catalina la Grande”, “Los Chacales del Oeste”, “El Hombre Tatuado”, “El Affaire de Thomas Crow”, “Con las Manos en la Bolsa”, “Las Mujeres” (con B. Bardot), “El Lenguaje del Amor”, entre otras…
El Cine América era el antiguo “Cine Radar” y se encontraba en la esquina de España y 25 de Mayo, actual Iglesia Universal. Para reservar las entradas, en 1974 publicaba en los periódicos un teléfono (fijo por supuesto) con solamente cinco dígitos como todos los números de la época: “20014”. Esta sala comenzaba a alejarse del centro, ya que para entonces tres cuadras de la plaza era un mundo, por lo que el público comenzaba a mermar. Era por eso que ofrecía su función “Continuada” que empezaba desde el Matinée, pasando por Selecta y concluyendo a la Noche. ¿Qué quería decir función continuada? Bien, en esa época, el cine costaba $ 3,50 para ver una película en Selecta o en función Noche. No se podían ver las dos películas con la misma entrada. Pero, en “función continuada” que en el cine América costaba $ 6, la persona del público podía entrar en cualquier horario desde las 16 hasta la una de la mañana y veía las dos películas sin que lo saquen de la sala. Estas funciones se diagramaban de la siguiente manera: “Película A”, se exhibía a hs. 16, 19,30 y 23; “Película B”, iba a hs. 18 y 21,30.
Entre las películas vistas en 1974, tenemos a: “Profesión Bígamo”, “Crimen en la Playa”, “Alaridos de la Carne”, “Los Profesionales”, “Un Ardiente Deseo”, “La Clase Obrera va al Paraíso”, “La Noche de los Generales”, “La Presa Erótica”, “La Otra Cara del Padrino”, “Estado de Sitio”, entre otros estrenos.
El Cine Balcarce se encontraba camino a la Estación de Trenes de la ciudad, hoy llamado “El Corredor Turístico Balcarce” o más popularmente “La Balcarce”, como se supone se encontraba en la calle (Antonio González) Balcarce al 800, entre Alsina y Necochea. Por su proximidad a los cuarteles, el mayor porcentaje de público estaba a cargo de los soldados conscriptos, sobretodo de aquellos que venían a cumplir con el servicio obligatorio desde el interior de la provincia o de otras provincias del país. Otro aporte, lo hicieron los provincianos del interior que llegaban en los trenes a la estación y se hospedaban en los hoteles cercanos, quienes para no irse hasta el centro, se iban al Balcarce, “ahí cerquita nomás”. Por su distancia al centro, ocho cuadras a la plaza 9, se constituía en un cine barrial, por lo que también esa zona del norte de la ciudad realizaba sus aportes al público de dicho cine. Este cine contaba con dos funciones: Selecta a hs. 18,15 y Noche a hs. 21,45. El costo de la entrada era un poco más caro ($ 4,50) quizás por el público mencionado “de afuera”, a los niños le cobraban $ 3.
Entre las películas que se exhibieron en ese año, podemos citar a: “La Más Hermosa Matanza del Mundo”, “Me siguen Llamando Trinity”, “La Mujer de Adán”, “Los Cowboys”, “La Furia del Hombre Lobo”, “Aventurero del Sahara”, “Ringo, El Caballero Solitario”, “El Regreso de Django”, “Dios los Cría y Ringo los Mata”, “La Furia Salvaje” y “Venganza al Estilo Chino”.
El Cine Rex Teléfono 10990, quedaba en la avenida General José de San Martín, casi pegado a la famosa Peña Balderrama, “a orillitas del canal” de la Esteco, entre esta arteria y la calle Gorriti. Era el más nuevo de todos, recién abría sus puertas. Aún no se había inaugurado el “Ópera”. La prensa local lo promocionaba mucho, como el caso de El Tribuno del miércoles 20-03-1974, que bajo el título de “Un Récord en el Cine Rex” que decía: “La sala del Cine Rex –de avenida San Martín- obtuvo en su sección de trasnoche del pasado sábado, un récord singular con la exhibición del filme “Confesiones de una azafata sueca”, que originalmente programado en trasnoche, luego de éste, debió ser nuevamente exhibido a pedido del numeroso público que formó una larga “cola” para adquirir entradas. La función de “súper trasnoche” finalizó a las 4,30 del domingo. Un verdadero record sin precedentes en esta ciudad.” Las funciones del Rex eran continuadas en la frecuencia 14,30 – 17,50 - 21,10 y 16,10 – 19,30 – 22,50. La entrada costaba $ 6 y el tono de las películas era picaresco prohibido para menores de 18 años de edad. También, los fines de semana, había una función trasnoche a hs. 0,45. Hacia 1974 el Rex tenía una sala muy concurrida donde se entremezclaban los estratos sociales. El apellido Abdenur, de su propietario, comenzaba a hacerse famoso en el negocio de los cinematógrafos.
Entre las películas exhibidas mencionaremos a: “Confesiones de una Azafata Sueca”, “El Asesino de la Noche”, Tratamiento Diabólico”, “Decamerón Prohibidísimo”, “Mariposa de las Alas Ensangrentadas” (que personalmente para verla, tuve que ir en compañía de una hermana mayor de edad, ocultando mis apenas e inaparentes 15 años) y “Trastévere” entre otros filmes.
El Cine Florida Debe su nombre a la calle donde alza sus instalaciones, Florida al 600. Así, lo que el “Balcarce” fue para la zona norte de la ciudad, el “Florida” lo fue para las barriadas del sur. Para aquellos que no se llegaban al centro y que, por el uso, lo habían convertido en un cine de barrio. Era el más simple y pequeño de los cines de Salta. Quizás el único que se mantuvo hasta la fecha, desde las primeras horas de las salas salteñas. Hacia 1974, presentaba durante la semana, dos funciones a saber, Selecta a las hs. 18,15 y Noche a hs. 21,45. Los fines de semanas los horarios eran Selecta a hs. 18 y Noche a hs. 21,15 y Trasnoche a hs. 0,45. El espectáculo en este cine costaba $ 5 (las dos películas).
Allí podíamos ver: “La Momia”, “Los Cowboys”, “Viva Django”, “Adiós Gringo”, “La Orgía”, “Frenesí”, “Cuentos de Ultratumba”, “Gentleman Joe”, “El Quinteto de la Muerte”, “Fantomas se Defiende”, “Duelo En Sonora”, “Maciste en la Isla del Rey Salomón” y “Los Caballeros de la Cama Redonda”, entre otros.
El Cine Cooperadora Escuela Hogar Conocido popularmente como el “Cine Hogar Escuela”, que desarrollaba sus actividades bajo la administración de la cooperadora de la Escuela Hogar “Carmen Puch de Güemes” sita sobre la continuación de la calle Mendoza, frente al “Rosedal” hoy Plaza Atlántico Sur, del Parque General San Martín. Su función durante la semana era irregular y se notaba su fuerte presencia los fines de semana. Con dos funciones, la Selecta a horas 18 y Noche a hs. 21,30. Entre el público asistente se podía apreciar a las familias que iban a pasear al parque San Martín, soldados conscriptos y empleadas domésticas “cama adentro” que gozaban del franco semanal, sábados a la tarde y sobre todo el domingo. También asistían muchos niños, alumnos del hogar escuela y otros de la barriada de la zona este de la ciudad.
Las películas que allí se exhibían no eran del todo malas, al contrario, había, a veces, muy buenos filmes. Entre todos, podemos citar a: “Hombres en Llamas”, “El Ultimo Guerrero” con Anthony Quinn, “La Pieza del Diablo”, “Talla de Valientes”, “El León Joven”, “El Candidato” con Robert Redford, “El Sargento Solitario” y “Muñecas en Cadenas”.
El Cine San Alfonso pertenecía a la parroquia del mismo nombre y, como los otros cines parroquiales de la ciudad, apuntaba a congregar a las familias y, sobre todo a los niños, de los barrios aledaños (macro centro norte de la ciudad). Allí concurrían los alumnos del colegio San Alfonso, los boy scout de la parroquia y los vecinos de la jurisdicción parroquial. Las películas que allí se veían, tenían que ajustarse a las normas de la Iglesia Católica. Este cine quedaba en calle Leguizamón al 800, casi esquina 20 de Febrero y funcionaba solo los fines de semana, en doble función: Selecta a hs. 18 y Noche a hs. 21,30.
Allí se exhibían filmes de producción argentina generalmente, como “Me Enamoré sin Darme Cuenta” con Sergio Denis y Luis Brandoni; “Siempre Fuimos Compañeros” con Hugo del Carril y Donald; “Bajo el Signo de la Patria” con Ignacio Quirós, Enrique Liporace, Ricardo Passano y música de Ricardo Falú; “Vacaciones en Argentina” con Enzo Viena, Tato Bores, Marcos Zucker, Vicente Rubino y Doménico Modugno; entre otras excelentes producciones.
El Salón Cultural Salesiano pertenecía a la obra “Don Bosco”, allí se concentraba el “Club Pibes Alegres” casi todos alumnos del Colegio Salesiano “Ángel Zerda”, boy scout de la parroquia y vecinos del macro centro oeste de la ciudad. El cine quedaba sobre calle Caseros al 1200, entre las calles (Carlos de) Alvear y (Simón) Bolivar. Los filmes que se exhibían en el lugar, debían aprobar los filtros religiosos y sociales que le imprimía la obra salesiana y podían ser vistos los fines de semana en dos funciones: Matinée a hs. 14,30 y Noche a hs. 21,30.
Podemos mencionar a “Aventuras de los Pequeños Fugitivos”, “Odio en las Praderas”, entre otros.
El Cine San Francisco cerraba la cadena de cines parroquiales, pertenecía a la obra de los padres franciscanos, dirigidos de manera local, en la oportunidad, por el recordado Padre Honorato Pistoia. A la sala ubicada en calle Caseros al 300, al costado de la basílica de San Francisco, asistían los alumnos del Colegio Tomasini y los vecinos de los barrios del macro centro este, por lo general, aunque se debe advertir que a todos estos cines asistían todas las familias de Salta. Generalmente tenía dos funciones y a veces una única función a la noche, abría sus puertas casi todos los días en sección Selecta a hs. 18, 15 y Noche a hs. 21,45.
Entre las obras se podía apreciar a “Mister Jericó y Los Vengadores” (cowboy); “Si quieres Vivir Dispara” (cowboy); “Tarzán y el Silencio Mortal” y “Piluk el Tímido que Conquistó el Oeste”, entre otras películas.
Cabe mencionarse que la antigua “Asistencia Pública” de avenida Belgrano al 1.300 también tenía una sala de cine, en el que desarrollaba irregularmente sus actividades el “Cine Arte de Salta”. Asimismo, en 1974, funcionaba el “Cine Club Universitario”, lo hacía en ciclos irregulares, para el mes de marzo se exhibieron: “El Romance de Aniceto”, “Los Jóvenes Viejos”, “Un Guapo del 900”, “Prisioneros de una Noche”, “La Vieja Dama Indigna”, “Hace un Año de Marienbad”, “Alphaville”, “La Strada”, “Los Compañeros”, “La Aventura”, “Rebelión”, “esplendor de la Hierba”, “Que Bello es Vivir”, “El Bandido de la Luz Roja”, “Adorado John”, “El Blanco Móvil”, “Tren Nocturno”, “Burlemos a la Ley”, “Erotikon” y “El Chacal de Nahuel Toro”. Las proyecciones eran en 16 mm. Por último, mencionamos que el cine “Apolo” de Ciudad del Milagro, a pesar de que el barrio fue inaugurado en 1974, aun no había abierto sus puertas.
Cerramos diciendo que en 1974 el cine de Salta y del país, comenzaba a declinar en el ocaso que vendría en los años ’80, pero aun así se veía el último fogonazo del atardecer cinematográfico. Salta tenía más salas que en la actualidad y una variada programación. Todavía el cine le ganaba de mano a su pulseada con la televisión y no había recibido el ataque directo de las “pirateadas” y los adelantos tecnológicos de la actualidad.
como llenaste de guita al marcos zucker-mann nena.yo pense que dios nos iva a ayudar pero parece que prefirio al balada de trompeta.tiene mas guita que lo que yo se contar..deja de afanarme lo que no tengo y ubicate.me venis currando fiero y me mandaste a varios al otro mundo.dame mis chicosvbno
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