Este poema de don Jaime Dávalos, dedicado a su hijo Jaime Arturo, lo recita siempre, junto a "La Muerte del Toro", José Luis Maradona Gómez en los concurridos asados organizados en la casa de Jorge Fontana, de la avenida Pizarro, en los pagos de San Ramón de la Nueva Orán. Yo lo conocí a Jaime Arturo en su casa de piedras en la "Loma de los Dávalos" en El Encón. Conocí la calidez de su amistad y la sencillez de su buen trato y cordialidad... Por eso pensaba en Jaime Arturo y en José Luis, dos extremos de una misma cuerda, el uno perteneciente a una familia de poetas y artistas, hacedores de las letras y, el otro, difusor de estos poemas, transmisor de la cultura salteña, para que la misma no duerma olvidada en libros cerrados de nuestras bibliotecas. Pero aun hay más coincidencias, la señora de Jaime Arturo era compañera de trabajo y muy amiga de los padres de José Luis en la recordada Caja de Jubilaciones que quedaba en la galería frente a la Plaza 9 de Julio de nuestra ciudad... Ahora si, disfrutemos de la poesía.
Con el escape libre para escuchar mejor el canto del motor ,
me voy a los campos montado en mi Ford.
Mi Ford es sencillo como el Clavileño de Alonso Quijano. Dócil a mi empeño,
va donde yo quiera, por valles y cuestas por cerros y lomas y verdes florestas .
Yo no tengo apuros, negocios ni estancias,
mas el que me vea, veloz como el viento,
tragar las distancias
rigiendo mi Ford,
cree que me protestan algún documento
o me ocurre un caso de fuerza mayor .
Nadie se figura,
nadie se imagina, ninguno sospecha,
el goce salvaje, rayano en locura,
de andar como flecha.
El hombre es un bípedo pesado, sotreta,
y por andar algo más que la tortuga,
domó los caballos y la bicicleta
inventó las máquinas de ponerse en fuga.
Por un cuesta abajo me largo en segunda,
mi alma en un vértigo tremendo se abisma,
y a medida que corro me inunda
un afán de romperme la crisma!
El Ford cruje entero,
ya parece saltar en pedazos!
y por el volante me sube a los brazos
una fragorosa vibración de acero!
Un pollo suicida se pasa en mi ruta y bajo las ruedas lo dejo extrachato .
Que no me perturbe la recta absoluta
ni perro ni gato,
pues voy sin disputa
sembrando el julepe y el asesinato.
Oh, Ford, auto cabra!
Auto mula, sencillo y liviano! Última palabra
del machinatismo norteamericano.
Buenísimo!!!!!!
ResponderEliminar¡Es muy divertido! además, quien ha andado por el campo en un Ford A (un Forá)sabe que es tal cual.
ResponderEliminarGracias por los comentarios amigos míos, que lindo Jorge que bueno lo que cuentas del "Forá" que experiencia no?? Yo lo sabía ver a don Dante Fabroni en uno de esos machinatos en El Quebrachal...
ResponderEliminarTuve la suerte de escucharlo hace muchos años en cosquín... años 60 y tantos....es una hermosura de poema y junto a la manera "desidora" que Jaime tenía, provocaba la risa "sana" de la concurrencia en la Plaza Próspero Molina.
ResponderEliminarLo recuerdo siempre a Don Jaime y lo quiero mucho, por lo que hizo por Salta y el Folcklore.
ttttttttttttaaaaaaaaaaaaa rrrrreeeeeeeeeeee peteeeeeeeeeeeee
ResponderEliminarGracias Julio, gracias Anónimo por brindarnos ese sonido único del Ford jajajaja
ResponderEliminarHola, quería aclarar una cuestión, debido a que soy un fanático lector de los Dávalos. El poema MI FORD, es de Autoría de DON JUAN CARLOS DAVALOS, padre de Jaime. Se lo escribió a su FORD T, con el que dio la primera vuelta a los valles calchaquíes cuando no habián caminos, junto con Moschetti. Luego con ese mismo auto, cruzaron con una comitiva hasta Chile, cuando no habían caminos. Debido a semejantes hazañas, es que escribió ese poema a su FORD.
ResponderEliminarJaime solo lo recitaba. Si se observa con detenimiento el vocabulario y el modo de escritura se dará cuenta que ese poema No fué escrito por Jaime, sino por su padre.
Hecha la aclaración, sin más ánimo que ese, aclarar.
Atte
Sebastián Diez
Así es... exactamente así... hay una obra discográfica en la que Jaime recita a su Tata y está esta pieza dicha por Don Jaime!!!
Eliminar...y en esa comitiva iba mi abuelo junto a Juan Carlos Dávalos...tengo fotos de la travesia.
EliminarSebastián...en la comitiva iba mi abuelo...tengo fotos de la travesía si te interesa
EliminarEscribime un mail y te cuento
Es exacto lo que expone Sebastián. Yo conozco el tema desde los años 50 cuando lo pon{ia y comentaba el peruano Guerrero Martineitz en su programa el show del minuto. No hay que confundir a los menores ni subestimar a los autores. Saludos!!
EliminarAhí estan las aclaraciones de don Sebastián, echando luz sobre este poema. Se agradece.
ResponderEliminarDoy fé Sebastian, soy Dávalos
ResponderEliminarMi nombre es Patricia, vivo en Entre Ríos y soy sobrina nieta deJuan
Eliminar"La poesia es de quien la necesita....." decia un personaje en la pelicula "El cartero",sobre la vida de Pablo Neruda, y don Jaime bien uso la herencia poetica de su padre recitandola maravillosamente. Oscar
ResponderEliminarHola Quebracho, mi nombre es Patricia y vivo en la provincia de Entre Ríos, y soy sobrina nieta de Juan Carlos Dávalos. El poema Mi Ford es de él, mi madre me lo recitaba cuando era pequeña... deberías corregirlo para que sea correcta la publicación. Jaime lo recitaba hermosamente, y se dedicaba a su padre
ResponderEliminar